Thakalis.
Vitalidad
Arropados por las faldas de la montaña del Dhaulagiri y de sus alrededores, existen unas 20 familias del Mustang que mantienen una tradición en peligro de extinción. Son los pastores de Yak. Un animal único perteneciente a los Himalayas y a algunas partes de Siberia. Dada su particularidad, estas familias viven de la transhumancia de yaks. Para ello, en verano, llevan a los yaks a las faldas del Dhaulagiri, casi a 5000 metros de altura.
Los yaks, hasta hace poco eran fuente de alimentación y de material. De él se sacaba leche, queso, carne y el pelaje se utilizaba para crear cuerdas y mantas. Hoy, la fuente principal de subsistencia lo realizan a través de un festival que se celebra dos veces al año.
En este festival se bebe la sangre de yak. Se dice que hay que beber siete vasos de sangre para poder obtener la fuerza transmitida a través de la sangre del yak. Pero en esta celebración no sólo se toma fuerza sino que los pastores enseñan sus destrezas de caza y su arte culinario. A través del tiro con arco. La carne de Yak.Y sobre todo su increíble perseverancia y vitalidad ante un mundo a punto de desaparecer.